Es posible que pacientes con ASMA y EPOC inhalen sin esfuerzo
Importancia de la broncodilatación como “piedra angular” del tratamiento de enfermedades pulmonares crónicas
Para muchos de nosotros respirar no implica mayor esfuerzo; lo hacemos de forma inconsciente. Sin embargo, para quienes viven con algún padecimiento respiratorio como asma o Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), trastornos caracterizados por una inflamación y obstrucción de las vías aéreas que generan tos, opresión en el pecho y sensación de falta de aire, entre otros, es más difícil mantenerse activo debido a la dificultad que tienen para realizar este proceso.
Por ello, conforme ambas enfermedades avanzan, esos síntomas empeoran de manera progresiva causando exacerbaciones (episodios de agudización acompañados de infecciones bacterianas y otras complicaciones), las cuales son la primera causa de urgencias médicas, hospitalización y muerte a nivel mundial,, de ahí que los pacientes que no reciben un diagnóstico oportuno y un tratamiento adecuado pueden ver mermada su salud y calidad de vida.
De acuerdo con el Dr. Oscar Rodrigo Villalva Rosas, Gerente Médico del Área Respiratoria de Boehringer Ingelheim México, Centroamérica y El Caribe, la compañía lleva cerca de 100 años comprometida con la investigación, desarrollo e innovación de terapias que resuelvan necesidades no cubiertas de personas con enfermedades pulmonares crónicas; tratamientos que continúan posicionándose dentro de la preferencia de los profesionales de la salud gracias a su eficacia y seguridad.
“Nuestra prioridad radica en que en pacientes con este tipo de padecimientos puedan inhalar sin esfuerzo, y esto sin duda puede ser una realidad si se considera a la broncodilatación como ‘piedra angular’ del tratamiento”, indicó.
“Además, otra forma de refrendar nuestro compromiso con los pacientes mexicanos es promover la educación médica continua, la cual ayuda a los profesionales de la salud a no solo brindar un diagnóstico oportuno y más certero, sino también conocer cuáles son los estudios de investigación y avances terapéuticos disponibles para disminuir la morbilidad y mejorar la calidad de vida de niños y adultos”, agregó el experto.
Es así como, líderes de opinión y neumólogos de México, Centroamérica y El Caribe se reunieron en el marco de la VII Edición de la Alianza de Expertos en Neumología (ADEN) organizado por la farmacéutica Boehringer Ingelheim, para compartir nuevo conocimiento y experiencias clínica, diagnósticas y terapéutica sobre enfermedades como el Asma y la EPOC bajo el contexto de la pandemia por COVID-19 y la temporada invernal donde se incrementan las infecciones virales.
En conferencia de prensa, el Dr. Juan Carlos Vázquez García, autor de la Guía de EPOC y miembro del Comité de Educación Médica Continua de la Sociedad Mexicana de Neumología y Cirugía de Tórax (SMNyCT), mencionó: “Debido a la temporada invernal, los pulmones son la llamada zona cero para la COVID-19, lo que hace que trastornos respiratorios sean una gran preocupación, pues la infección por este y otros virus asociados a la estación puede aumentar la probabilidad de complicaciones y muerte en los pacientes que no llevan un adecuado control,”.
El médico recalcó que “existe toda una gama de broncodilatadores inhalados, solos o combinados, que son esenciales en el tratamiento de primera línea o complementario, los cuales optimizan la función pulmonar, reducen la obstrucción de las vías aéreas, la disnea (falta de aire), las exacerbaciones (aumento/frecuencia de síntomas) y elevan la tolerancia al ejercicio físico, con el fin de mejorar la calidad de vida de los afectados”.
Entre ellos figuran el salbutamol más bromuro de ipratropio, medicamento de rescate; el broncodilatador mono de larga duración tiotropio e indicado como terapia de mantenimiento en pacientes con EPOC y en niños con Asma de 6 años en adelante y, por último, la combinación de este más olodaterol, para el mantenimiento prolongado de personas con EPOC. Destacó que, por sus beneficios terapéuticos, estos tratamientos contribuyen con el bienestar de las personas a quienes el médico exhortó a no abandonarlos.
Por su parte, el Dr. Luis Albrecht Septién Stute, Médico Internista y Neumólogo del Hospital Médica Sur, aseveró que actualmente a nivel mundial 384 millones de personas en el mundo padecen EPOC, lo cual se traduce en 3 millones de muertes anuales.
“El principal reto es que más personas reciban un diagnóstico temprano y cuenten con un tratamiento que se ajuste a sus necesidades de salud y reduzca el número de hospitalizaciones por exacerbación. Quienes tienen la indicación terapéutica correcta, pueden llevar una vida normal, pues esto les brinda la oportunidad de respirar mejor”, mencionó.
Ambos especialistas resaltaron que estos broncodilatadores se administran con un dispositivo inhalador llamado Respimat, cuya innovación tecnológica libera una nube de suave dispersión que hace que la sustancia activa llegue directo al sitio donde se necesita, lo que permite que el paciente pueda respirar sin esfuerzo a diferencia de otros dispositivos de polvo seco.
Por otro lado, el Dr. Oscar Villaba, Gerente Médico del Área Respiratoria de Boehringer Ingelheim México, Centroamérica y El Caribe, indicó: “Año con año trabajamos para mejorar la experiencia de la comunidad médica a través de plataformas como Boehringer Ingelheim Click, la cual forma parte del compromiso de la compañía por continuar aportando a la carrera digital en salud por medio de iniciativas que provean a los profesionales un sin fin de materiales e información avalada por diferentes asociaciones y sociedades médicas como el Consejo Nacional de Neumología, la Sociedad Mexicana de Neumología y Cirugía de Tórax y la Asociación Latinoamericana de Tórax. Tan solo este año, se calcula la participación de más del 80% de los neumólogos de México; es decir, alrededor 500 a nivel nacional”.
Finalmente, los especialistas concordaron que eventos tan reconocidos como la Alianza de Expertos en Neumología (ADEN), que se celebra desde el 2013, se vuelven imprescindibles en situaciones de crisis como la que estamos viviendo, ya que la innovación, investigación y la educación médica hacen posible salvar y mejorar vidas.