Buena salud gracias a tu alimentación
Tú eres lo que comes. Este proverbio está presente para muchos de nosotros a lo largo de nuestras vidas: sirve como aliciente, pero a la vez como amenaza. En última instancia, la lección es que los alimentos forman una gran parte de nuestra salud, ayudando a equilibrar nuestros cuerpos, dándonos energía, regulando nuestro sistema y, a menudo, previniendo enfermedades. Esta lección culinaria universal trasciende las culturas.
El problema es que a menudo pensamos que los alimentos saludables son insípidos y caros, e intentamos una alimentación saludable con cambios drásticos en nuestra forma de comer. Y así, nos sentamos en un estado de parálisis, pensando que dicho proverbio "tú eres lo que comes" se convierte en un enemigo, pero estos temas no deben de ser así, por lo que te mostraremos la forma de cambiarlo.
¿CÓMO HACER QUE COMER SANO SEA MÁS FÁCIL?
Es importante pensar en una alimentación más saludable con pequeños pasos que conducen a un cambio mayor. Un punto de partida efectivo son los aceites con los que cocinamos.
El aceite de oliva, aceite natural extraído de las aceitunas, como Carapelli, es considerado internacionalmente como una de las opciones de aceite de cocina más saludables. Lo que lo hace genial, ya que sus beneficios para la salud nos permiten seguir disfrutando de nuestros ingredientes y formas de cocinar favoritas, sin desviaciones radicales al estilo de vida ni al gusto.
EL ACEITE DE OLIVA PUEDE AYUDAR A REDUCIR EL COLESTEROL
El aceite de oliva, por naturaleza, es naturalmente libre de colesterol y no contiene sal. También es rico en ácidos grasos monoinsaturados (77%), en particular el ácido oleico, por lo que diversos estudios médicos indican que pueden ayudar a mantener los niveles normales de colesterol al ingerirlo con moderación. Y, por lo tanto, reducen el riesgo de desarrollar enfermedades relacionadas con el colesterol alto.
BUENA FUENTE DE ANTIOXIDANTES
Una cucharada de aceite de oliva Carapelli proporciona el 8% de la cantidad diaria recomendada (RDA) para la vitamina E, que está vinculada a disminuir el proceso de envejecimiento de nuestras células. Del mismo modo, el aceite de oliva contiene polifenol, otro antioxidante natural que no se encuentra en ningún otro aceite y que tiene propiedades benéficas para proteger a nuestro cuerpo contra las enfermedades cardiovasculares y la diabetes.
El aceite de oliva puede proteger contra las enfermedades cardiovasculares
El aceite de oliva tiene una mayor cantidad de ácido graso monoinsaturado (MUFA) que otros aceites vegetales. Los MUFA se consideran una grasa saludable a base de plantas, que también se encuentra en las nueces, los aguacates y el chocolate negro. Debido al aumento de los niveles de ácidos grasos monoinsaturados en el aceite de oliva, ayudan a mantener los niveles normales de colesterol al reemplazar las grasas saturadas en la dieta.
Este útil ingrediente también puede ayudar a fortalecer los vasos sanguíneos, proteger contra el Alzheimer, disminuir el riesgo de enfermedades cardíacas y proporciona nutrientes que ayudan a mantener las células de tu cuerpo.
El consumo de aceite de oliva puede disminuir el riesgo de diabetes.
La abundancia de antioxidantes del aceite de oliva Carapelli, ayuda a reducir los efectos del estrés oxidativo que sufren los diabéticos debido a los altos niveles de azúcar en la sangre. Por lo tanto, reduce el riesgo de complicaciones de la diabetes, así como el daño nervioso causado por la diabetes (neuropatía diabética) y la neuropatía retiniana.
Los beneficios para la salud de reemplazar algunos tipos de aceite convencionales por aceite de oliva Carapelli son claros. El aceite de oliva también es versátil y se puede utilizar a altas temperaturas (242 ° C), por lo que puede cocinar todos sus platillos favoritos, así como freírlos. Lo mejor de todo es que le brinda la oportunidad de una vida más saludable sin aburrimiento o grandes cambios en el estilo de vida.